En esta publicación te diremos cuáles son los mejores postres de Portugal, para que en tu siguiente viaje a este país no dejes de probarlos.
1. Arroz doce
El arroz doce es un arroz con leche dulce elaborado con arroz, leche, azúcar, huevos, canela y sal. La primera versión se hizo en Portugal, pero hoy en día es un postre popular en todo el mundo, con una gama muy amplia de variaciones en la receta, desde el uso de leche condensada hasta la exclusión de huevos.
Se dice que el mejor arroz doce debe quedar crujiente por fuera y como una natilla y suave por dentro. El plato se suele servir después del plato principal como postre, dejando un sabor dulce en la boca. Por lo general, se sirve frío, aromatizado con cáscara de limón y espolvoreado con canela en la parte superior en un patrón de celosía.
2. Bolo de arroz
Un alimento básico en casi todas las panaderías portuguesas, el bolo de arroz es un pastel de arroz ligero y aireado que se caracteriza por su dulzura suave y un refrescante sabor a limón. De forma similar a los cupcakes o muffins, los pasteles generalmente se hacen con una combinación de arroz y harina de trigo, mantequilla, leche y huevos.
Una pizca de azúcar antes de hornear les da una corteza dorada y caramelizada. Se puede disfrutar como un desayuno dulce o una merienda ligera que combina perfectamente con leche, café o té.
3. Las bolas de Berlim
Las bolas de Berlim son donas portuguesas que se cortan por la mitad y luego se rellenan con crema pastelera dulce y cremosa a base de huevo. Esponjosas por fuera y espesas y cremosas por dentro, estas rosquillas normalmente se enrollan en azúcar granulada antes de rellenarlas con las natillas.
En la costa portuguesa, los vendedores venden estas deliciosas bolas en numerosas playas y a los lugareños les encanta consumirlas mientras toman el sol. Aunque las bolas de Berlim normalmente se rellenan con natillas, también se pueden pedir sem creme, es decir, sin el relleno cremoso.
4. Leite de creme
Leite de creme es una natilla de huevo tradicional originaria de Portugal. Está hecho con una combinación de yemas de huevo, leche, azúcar, almidón de maíz, canela y cáscara de limón rallada. Los huevos se baten con la leche, luego se mezclan con azúcar y almidón de maíz.
La combinación se calienta a fuego lento con canela y cáscara de limón, y es necesario remover la mezcla continuamente. Cuando la consistencia se vuelve espesa, se vierte leite de creme en moldes y se deja enfriar. Antes de servir, se espolvorea un poco de azúcar por encima y se dora con un soplete.
5. Pan dulce
Traducido como el pan de Dios, este postre tradicional portugués es una combinación de un brioche suave y un aderezo hecho con coco desecado y huevos. La masa generalmente se condimenta con ralladura de limón, ron o vainilla y los bollos se hornean hasta que la cobertura se vuelve dorada y crujiente.
Estos panecillos dulces se comen durante todo el año y se disfrutan comúnmente para el desayuno, pero también están asociados con el “Día de Todos los Santos” y la antigua costumbre portuguesa conocida como pão-por-deus, en la que los niños tocan puertas recitando poesía y pidiendo dulces.
6. Pastel bolo de mel
Considerado el postre más antiguo de Madeira, el bolo de mel es un pastel elaborado con miel, almendras, nueces, canela y otras especias. Se cree que esta torta ricamente especiada se inventó en el siglo XV, durante la expansión de las plantaciones de azúcar en la isla y originalmente se elaboraba con melaza, lo que significaba que podía almacenarse hasta por 5 años.
El bolo de mel se preparaba tradicionalmente para Navidad, pero hoy en día se puede encontrar durante todo el año porque es muy popular entre los lugareños. En Madeira, se acostumbra no cortar el pastel, sino arrancar los trozos a mano.
7. Pastel bolo rei
Es un postre portugués básico. Aunque tiene orígenes en Francia, el pastel llegó a Portugal durante el siglo XIX. Este se prepara y consume tradicionalmente durante las vacaciones de Navidad, desde el 25 de diciembre hasta el 6 de enero.
Esta torta redonda con un agujero en el medio generalmente se cubre con azúcar cristalizada, frutas secas y nueces.
8. Pastel de Belém
Pastel de Belém es una tarta de natillas de huevo tradicional portuguesa y un predecesor del famoso pastel de nata. Las tartas están hechas con una cáscara de hojaldre que se rellena con una combinación de leche, huevos, azúcar, limón y canela. La primera receta de pastel de Belém se remonta a 1837 cuando fue elaborada por los monjes del monasterio de los Jerónimos.
Solo las tartas de natillas producidas en la Fábrica Pastéis de Belém pueden llamarse pastel de Belém, mientras que todas las demás, producidas por otras pastelerías de Lisboa, se llaman pastel de nata. Independientemente del nombre, estas tartas se pueden servir frías o calientes y en 2009, The Guardian incluyó el pastel de Belém como una de las 50 “mejores cosas para comer” del mundo.
9. Pastel de nata
Pastel de nata es una tarta de natillas de huevo tradicional portuguesa que es popular en todo el mundo. Se cree que para obtener el mejor resultado, el relleno no debe ser demasiado dulce y no debe tener sabores a limón ni vainilla. En cambio, las tartas deben espolvorearse con canela e, idealmente, acompañarlas con una taza de café.
Originalmente, este obsequio fue hecho antes del siglo XVIII por monjes y monjas católicos en Santa Maria de Belém en Lisboa. La tarta se hacía con las yemas de huevo sobrantes que se usaban en el aclarado de vinos y el almidón de la ropa. Más tarde, los clérigos hicieron un trato con una panadería cercana para comenzar a vender pastel de nata comercialmente y el producto fue un gran éxito.
10. Pastel Pão de Ló de Ovar
Sin duda, este puede ser el pastel portugués más famoso, que se remonta al siglo XVIII cuando las monjas lo elaboraban en los conventos. Las primeras evidencias escritas sobre este bizcocho se remontan a 1781, en un libro llamado Irmandade dos Passos, donde se dice que el Pão de Ló de Ovar era un dulce ofrecido a los sacerdotes que tomaban el armazón de madera para llevar las estatuas en la “Santa Procesión de la semana”.
Este bizcocho cremoso se hace tradicionalmente a partir de huevos, azúcar y harina, y hoy en día se ve a menudo en la mayoría de las ferias gastronómicas de Portugal. El pastel es popular en todo el país, no solo en el municipio de Ovar, donde se elabora tradicionalmente.
Conclusión
Ahora que conoces algunos de los postres de Portugal más populares, ¿Cuál es tu favorito?
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